La casa está orientada hacia el sur. En invierno tenemos un gran ahorro de calefacción por la gran balconera, y en verano la sala-comedor queda protegida del sol por el porche. La terraza pero necesitaba sombra en verano.
La pérgola permite una transición fluida de adentro hacia afuera. Decidí de diseñar la pérgola de hierro por su estabilidad y perfiles ligeros. La distancia entre vigas corresponde a la anchura de cañizo de bambú. El resultado cumple con todos los nuestros deseos, la sombra es muy agradable y permeable al aire.